Iglesia Parroquial Regina Mundi
La Calle Mayor, principal calle del poblado de Torre de la Reina, nos lleva directamente a la puerta de la Iglesia, que está situada en una esquina de la Plaza Mayor. Data de 1952 y lo primero que nos llama la atención es la fachada retablo. Se trata de un mural cerámico con siete cuadros en los que se narran escenas de la Vírgen y Santa Isabel. Se estructura mediante tres calles, tres pisos y ático con la imagen del Dios Padre en el tímpano. Se representan las escenas de la Anunciación, Visitación, Adoración de los Magos, Dormición de la Vírgen, y en el último cuerpo la Coronación de la Vírgen. La estructura de la fachada nos recuerda a la de La Moheda, en Cáceres. Es una pena desconocer el autor de esta obra. La torre-campanario, adosada a la cabecera está situada en el lado del evangelio cerrando la pequeña Plaza de la escuela. El cuerpo de la escalera es un paralelepípedo blanco y esbelto de planta cuadrada, y el cuerpo de campanas una especie de templete con remate piramidal de cerámica blanca y azul. Se produce un juego luces y sombras con las diferentes alturas de las naves, capillas y el presbiterio. Es curios el paño cerámico de tipo naif de la Virgen del Rocío situado en la cabecera.
El interior del templo es blanco y luminoso y se encuentra perfectamente conservado. Su planta es basilical, de una sola nade con capillas laterales estructurada en cinco tramos, coro alto y presbiterio. Una tribuna recorre todo el templo aligerando la pesadez y cerramiento de los altos muros. Se cubre con bóveda vaída con lunetos que junto con el rosetón de la cabecera aportan luz natural al interior.
El presbiterio está presidido por el retablo de la Inmaculada , un altorrelieve de una Inmaculada gigante, muy estilizada, rodeada de ángeles orantes. La Virgen se nos muestra de pie en actitud piadosa sobre la media luna. El autor de esta obra es José Luis Sánchez.
En la primera capilla del lado de la epístola se sitúa el baptisterio compuesto por una sencilla pila bautismal de caliza blanca con tapa de bronce. Tras ella se sitúa el relieve del Bautismo de Cristo de madera sin policromar.
En otra capilla podemos ver la imagen de San Isidro Labrador, atribuida al escultor Lorenzo Frechilla. La iconografía de este santo es la más repetida en los poblados de colonización por ser un ejemplo a seguir por los campesinos. Es una talla sin policromar con aspecto de robustez y fuerza. La imagen de Santa Isabel es una talla policromada de inspiración gótica con canon largado y sinuoso.
Muy venerada es la imagen del Cristo, talla de formato más pequeño que el natural realizado por el artista valenciano José Capuz, siendo una obra seriada que podemos encontrar en Extremadura y Andalucía y que está inspirado en el modelo barroco de Cristo de la Expiración pero con un toque de modernidad.
Se ha conservado bastante mobiliario de la dotación original entregada por el Instituto Nacional de Colonización siendo los mismos bastantes funcionales.
Torre de la Reina celebra sus fiestas Patronales en honor a su patrón San Isidro Labrador en Mayo y su romería en Junio